Vodafone y Orange lloran a la CNMC, Telefónica también

La hipocresía cabalga a lomos de un corcel tan veloz que nadie pone la cordura suficiente para analizar las contradicciones que desparraman a los cuatro vientos. El sector de las telecomunicaciones en España anda de nuevo a la gresca, y esta vez no tiene nada que ver con los precios. Vodafone y Orange relinchan ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) porque Telefónica abusa de su poder con respecto a los servicios de televisión, y a su vez estos se quejan por la posible obligación de compartir fibra.

¿Nunca llueve a gusto de todos? Parece ser que en las ‘telecos’ que operan en España no. Resulta cuanto menos curioso que los tres grandes operadores puedan tener quejas ante el regulador competente, y lo mejor, que todos crean que llevan razón. Para intentar poner un poco de orden en todo esto, vayamos por pasos, y empezaremos por el final, que además se puede desmontar con suma sencillez. 

En un encuentro con la prensa, el director de regulación de Orange, Julio Gómez, afirma que no tienen nada en contra de que Telefónica compre derechos televisivos, pero a su vez añade que “debe garantizarse que si cualquier usuario quiere ver las motos o la Champions no tenga que comprar el móvil y la banda ancha de Telefónica”. Es decir, con eso insinúa que lo clientes terminan siendo cautivos ante ofertas que le obligan a comprar “todo el paquete”. Ahora bien, ¿no hacen Orange y Vodafone lo mismo con las ofertas convergentes con respecto a los operadores virtuales? 

Como tienen red móvil y fija desplegada, uno de sus grandes recursos es ofertar grandes ventajas en la telefonía móvil si también accedes a su ADSL. Vamos, que animan a comprar “todo el paquete” para que salga rentable, ¡vamos!, igual que hace Telefónica con las motos o la Champions, solo que aquí se ofrecen más megas o un smartphone si te haces ADSL. Parece evidente que los llantos son caminos de ida vuelta, y que resulta curioso reclamar acciones que uno mismo hace a otros niveles. 

El otro argumento que exponen desde Orange, y que echan en cara a Telefónica, tiene que ver con la amenaza de estos en su abandono de inversión si les obligan a tener que compartir su red de fibra. Bueno, con lo traviesa que es la hemeroteca, seguro que encontramos quejas sobre la inversión en redes móviles con respecto a los OMV y los servicios mayoristas que deben prestar. 

Vodafone, otro que llora                                                                          

“El que no llora no mama”. En este caso sería algo así como “el que no berrincha ante la CNMC no se lleva nada”. De esta forma, unos días antes fue Vodafone. Contentos con la decisión del regulador de obligar a Telefónica a compartir su despliegue de fibra, sus lamentos, al igual que los de Orange, se traducen en forma audiovisual.

Esto tiene que ver con los servicios de televisión. El operador rojo pide que se frene la compra de Canal Plus por parte de Telefónica y que todo sea revisado para que haya una justa competencia en ese segmento y el incumbente no esté en posición de dominio con respecto a los demás, de nuevo. 

Curioso. “Posición de dominio”. Eso es lo que según el CEO de Vodafone España, Antonio Coimbra, ya no existe en nuestro país en telefonía móvil, y por eso piden a la CNMC que anule la “dominancia conjunta” por la cual tienen que prestar servicios mayoristas a los operadores virtuales. Tener un 90% de cuota de mercado (móvil) entre tres empresas no le parece dominar el mercado, es decir, lo mismo que sucedería con la televisión, pero como en este caso esa porción de tarta no está a su gusto, pues berrinche. 

Telefónica, ¿tú también?                                                                         

Esto lo inicia Telefónica con su reticencia a seguir con los despliegues de fibra si le obligan a compartir. Por cierto, esto puede tener una réplica exactamente igual con la televisión. Si la CNMC oye los lamentos de Vodafone y Orange, y de algún modo “mete mano” al sector audiovisual, que nadie se sorprenda si el incumbente amenaza con dejar a la población sin fútbol y toros. 

Todos llorando, todos creyendo tener razón, y todos equivocados al pensar que en un mercado fuertemente regulado ninguno saldrá ganando. “Pan para hoy, y hambre para mañana”. Sentar el precedente de que si algo no gusta se debe regular, abre la puerta que ellos mismos pretenden cerrar a los operadores virtuales, o a otros que pueden llegar de otras latitudes (Carlos Slim). Pretenden mamar a base de llantos, mientras sus servicios de atención al cliente siguen cuestionados, mientras las organizaciones de consumidores reciben miles de quejas al día, mientras la gente sigue molesta por recibir llamadas a deshoras por las pésimas gestiones de sus call centers… El corcel sigue cabalgando, y no parece que nadie lo pueda detener. 

Por: Raúl Masa (@raulmasa)