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Telefónica invierte 10M€ en la digitalización de la Biblioteca Nacional


“Si no hubiera sido por Telefónica no se hubiera podido digitalizar”. Rotunda, directa y clara. Así se ha mostrado la directora de la Biblioteca Nacional (BNE), Ana Santos Aramburo, durante la presentación del acuerdo firmado entre Telefónica y la BNE para la digitalización de sus fondos. Mejor dicho, hay que hablar de renovación del acuerdo, ya que ambas partes, tanto la compañía de telecomunicaciones como la propia Biblioteca Nacional, llevan trabajando en el proyecto algún tiempo. 

El desarrollo y difusión de la cultura cuesta dinero. En ese punto debemos coincidir sin ningún tipo soflama populista. Por ello, parece bastante lógico que sean las empresas privadas, que de dinero saben un rato, quienes apuesten decididamente por el patrocinio, mecenazgo o apoyo a la cultura en cualquiera de sus vertientes. Bien es cierto que el altruismo de muchas compañías privadas se sitúa en el punto de fricción que se establece con las exenciones fiscales que luego obtienen de ello, pero ambas acciones, bien llevadas y controladas, deben ser el impulso necesario para el desarrollo de la cultura en un país como España. 

De este modo, la renovación del acuerdo entre Telefónica y la Biblioteca Nacional, que lleva tras de sí una inversión de 10 millones de euros, más otros 500.000 euros que faltan por llegar, supone un claro esfuerzo para hacer la cultura (de todos) más accesible para todos. 

Sobre lo que ya se puede contar, se ha conseguido que 150.000 títulos de los diferentes tipos de materiales que se encuentran en la BNE: dibujos, grabados, fotografías, partituras, libros impresos y manuscritos, registros sonoros, material cartográfico, revistas y periódicos, etc., estén al alcance de cualquier ciudadano en cualquier lugar del mundo gracias a ese proceso de digitalización. Todo en un gran esfuerzo por parte de la Biblioteca que ha llevado un ritmo de 30.000 páginas digitalizas al día, para alcanzar la cifra de 25 millones.


Se trata de una apuesta necesaria, ya que según afirma la directora de la Biblioteca Nacional, como se señala al inicio de este texto, "con el presupuesto que tiene la organización para su trabajo diario hubiera sido imposible llevar a cabo este proceso de digitalización". Por lo tanto, parece lógico que este debe ser un modelo a seguir. Ambas partes ganan, aunque el director de Asuntos Públicos y Regulación de Telefónica, Carlos López Blanco, no ha precisado cuál es el retorno que obtiene su compañía, la realidad es que al final todo tiene su recompensa. 

Asimismo, Telefónica reafirma su compromiso con la cultura española, ya que como bien justifica la directora de la BNE, "este proyecto de digitalización tendrá una validez y uso real para los usuarios e investigadores que lo necesiten". Es por ello que se debe reconocer el mérito que ambas partes tienen al haber alcanzado este acuerdo, y que deba servir para que otras muchas compañías se sigan volcando en algo que es patrimonio de todos los españoles. 

Por: Raúl Masa (@raulmasa)

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