Orange no comprará Jazztel y mil teorías más

El mundo empresarial y futbolístico es a veces tan similar, que cambiando nombres y cifras, son noticias casi idénticas. Que se lo digan a Orange y Jazztel, que bien podrían ser parte de una trama futbolera para fichar a la última estrella del viejo contienen y así plantar cara a los grandes. 

De este modo, como sucede en el entorno futbolístico cuando llega el largo verano y no hay competiciones, los rumores son el pan que alimenta a los lectores insaciables de nueva información. Por lo tanto, y si el asunto de la compra de Jazztel por parte de Orange no fuera suficiente, ahora entra en acción el mercado de telecomunicaciones francés y las repercusiones en España. 

Esto se articula de la siguiente manera. La semana pasada surgió la información de que Orange compraría Bouygues. Al margen de teorías varias sobre un rescate al que obliga el Gobierno galo a Orange, la realidad es que de inmediato todo el mundo miró a Jazztel y su valor en Bolsa. Después de mucho tiempo estaba "pinchando," el famosos objetivo de hacerles perder valor se empezaba a convertir en realidad, las sirenas rumorológicas se volvían a encender, aunque realmente muchos parecen no querer entender la situación actual. 

El valor de Jazztel no son códigos enviados a la Bolsa que hacen fluctuar su valor en función de acciones no ponderables. La ‘teleco’ española siguen creciendo de forma sostenida en cuanto a número de clientes, sus redes aumentan poco a poco, y lo más importante, el valor real de la compañía va más allá de un índice bursátil. Por lo tanto, no se trata de coger una aguja y pinchar la supuesta burbuja donde Orange cree que está instalada para poder comprarla. Su precio real en el mercado es el fijado en torno a los 3.000 millones de euros y de ahí no bajará. 

MIL TEORÍAS LOCAS 

Una vez que Orange choca contra la realidad, es cuando llegan las diversas teorías colaterales sobre la operación. Siguiendo atentamente el Foro no-oficial de Jazztel, sus usuarios, siempre cercanos a la información de la compañía, plantean diversos escenarios, siendo algunos de ellos muy válidos. 

El primero tiene que ver con Yoigo. Se trata de una operación arriesgada, sin una vertiente real de cómo se integraría todo, pero con el halo espiritual de Telefónica observando por detrás, por el cual el incumbente sería el máximo ganador de todo esto, ya que seguiría controlando la red que ofrece a esa unión entre Yoigo y Jazztel, sobe todo por el 4G en la banda de 800 MHz, y de paso, y más importante, mantiene a Orange a una larga distancia competitiva, por lo que solo tendría que preocuparse de Vodafone-One en su tarea de ser líder en el mercado. 

Y si, y si… y si Vodafone es la que finalmente se esconde tras Jazztel. Esta teoría es la que menos partidarios tiene, ya que tras la compra de Ono, más su propio despliegue en fibra, no parece que estos momentos sea una prioridad, pese a que su CEO, Vittorio Colao, manifestase hace poco que tienen la billetera preparada ante cualquier escenario. 

Orange está creciendo en España, y sabe que su única posibilidad de seguir haciéndolo no puede ser sola. Ellos lo saben, lo sabe el mercado, y lo sabe Jazztel. Así pues, ya pueden escopetear perdigones en Francia, pero su única opción de ser un “grande” en España pasa por sacar los euros en suelo ibérico, aunque cada día que pasa todo se complica más, y lo que antes era un opción casi segura, ahora se convierte en algo remoto. 

Por: Raúl Masa (@raulmasa)